Monografias.com > Sin categoría
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

Enfermedades de transmisión sexual (página 2)




Enviado por Romero Gabriela



Partes: 1, 2

Enfermedades de
Transmisión Sexual (ETS)

Son enfermedades bacterianas
cuya transmisión suele producirse durante la
relación sexual, tanto por vía vaginal, anal u
oral.

Las causas más comunes de la transmisión
de enfermedades sexuales son el tener parejas sexuales
múltiples, tener una pareja con una historia
desconocida, usar
drogas o
alcohol en situaciones donde puede haber
intercambio sexual, tener relaciones homo u heterosexuales
promiscuas o tener una relación sexual sin la
protección adecuada como la que ofrecen los preservativos
en el varón o la hembra.

Hepatitis B

La hepatitis B,
llamada VHB (virus de
hepatitis B), es un virus que infecta al hígado (el
hígado ayuda a digerir la comida y mantiene la sangre
saludable). Actualmente es la única ETS que se puede
prevenir con una vacuna.

¿Quién puede contraer la Hepatitis
B?

Cualquier persona puede
contraer hepatitis B. Las personas que tienen relaciones
sexuales sin protección o usan drogas
inyectables tienen más probabilidades de contraer
hepatitis B.

¿Cómo se transmite la Hepatitis
B?

La hepatitis B puede vivir en todos los líquidos
del cuerpo, pero se transmite principalmente a través de
la sangre, el semen y los líquidos vaginales. El virus
también puede vivir en líquidos del cuerpo como la
saliva, las lágrimas y la leche materna.
Es posible infectarse de las siguientes maneras:
Teniendo relaciones sexuales (por vía vaginal, anal u
oral) con una persona infectada
Compartiendo artículos personales como hojas de afeitar,
cepillos de dientes y cortaúñas con una persona
infectada.

Compartiendo agujas para inyectarse drogas con una
persona infectada
Usando agujas o equipo no estéril para hacerse tatuajes,
perforarse los oídos para ponerse aretes, o aplicar
acupuntura, Una madre infectada con hepatitis B también
puede pasarle el virus a su bebé durante el parto.

¿Cuáles son los síntomas de la
Hepatitis B?

Muchas personas no tienen síntomas. Algunas
personas pueden tener hepatitis B sin tener ningún
síntoma y luego volverse inmunes (lo cual significa que
están protegidas contra infecciones futuras por hepatitis
B). Algunas personas pueden tener síntomas que desaparecen
y luego volverse inmunes. Otras contraen el virus y nunca se
vuelven inmunes. Estas personas son portadoras y pueden continuar
transmitiendo el virus a otros, aun años después.
Si una persona tiene síntomas, éstos pueden tardar
entre 6 semanas y 6 meses en aparecer después de la
infección con hepatitis B. Muchas personas con hepatitis B
tienen síntomas parecidos a los de la gripe. Los
síntomas pueden incluir:

  • Cansancio, falta de energía
  • Pérdida del apetito y de peso
  • Fiebre
  • Tono amarillento de la piel o los
    ojos (ictericia)
  • Dolor muscular o de articulaciones
  • Dolor de estómago
  • Náusea, vómitos
  • Diarrea
  • Orina de color
    oscuro
  • Evacuaciones (movimientos intestinales) de color
    claro
  • Hígado hinchado y sensible al tacto (el
    proveedor de cuidados de salud lo detecta durante
    el examen médico)

¿Cómo se diagnostica la Hepatitis
B?

El proveedor de cuidados de salud puede diagnosticar la
hepatitis B mediante un análisis de sangre.

¿Hay cura para la Hepatitis B?

No hay cura para la hepatitis B. Pero la mayoría
de las personas se recupera y no tiene ningún
síntoma después de 6 meses. El tratamiento consiste
en conseguir suficiente descanso, comer una dieta saludable y
evitar el alcohol. El
proveedor de cuidados de salud verifica que el hígado
esté funcionando normalmente mediante análisis de
sangre. Algunas personas llevan el virus sin tener
síntomas y pueden transmitírselo a otros. La
hepatitis B también puede causar síntomas de larga
duración, así como enfermedad permanente del
hígado, incluyendo cáncer del
hígado.

¿Cómo puedo prevenir transmitir la
Hepatitis B a otros?

Si estás infectada, no tengas relaciones sexuales
ni contacto íntimo con nadie (por ejemplo, besarse) hasta
que tu proveedor de cuidados de salud lo apruebe. No compartas
artículos personales, como hojas de afeitar y cepillos de
dientes.

Es posible tener hepatitis B sin siquiera saberlo y
transmitirlo a otros. Asegúrate de decirle a tus
compañeros(as) de relaciones sexuales, actuales y
anteriores, que tienes hepatitis B, ya que es posible que los
hayas infectado. Aliéntalos a vayan a su doctor lo antes
posible, que se hagan la prueba, y que consulten la posibilidad
de recibir globulina gamma y vacunarse para protegerse de la
hepatitis B. Una vez que tu proveedor de cuidados de salud diga
que puedes volver a tener relaciones sexuales, asegúrate
de usar condones de látex (o de poliuretano para personas
alérgicas al látex) al tener relaciones sexuales
por vía oral, anal o vaginal.

¿Cómo yo puedo evitar contraer la
Hepatitis B?

Tu mejor protección contra la hepatitis B es una
vacuna. Se da en 3 inyecciones separadas. Tienes que recibir las
tres dosis para que la vacuna te dé la máxima
protección. Puedes bajar tu riesgo de
contraer hepatitis B no teniendo relaciones sexuales o, si las
tienes, usando un condón de látex. Si te enteras
que tu compañero(a) tiene hepatitis B, pregúntale a
tu proveedor de cuidados de salud si necesitas globulina gamma
y/o la vacuna. También puedes reducir tu riesgo de
contraer hepatitis B evitando lo siguiente:

  • Compartir agujas o jeringas
  • Compartir instrumentos usados para perforarse los
    oídos para ponerse aretes hacerse tatuajes y remover
    pelo
  • Compartir cepillos de dientes u hojas de
    afeitar.

VIH/SIDA

SIDA son las siglas de Síndrome de
Inmunodeficiencia Adquirida. El SIDA es
causado por el VIH (Virus de Inmunodeficiencia
Humana
). El VIH ataca al sistema
inmunológico del cuerpo, principalmente a los
glóbulos blancos (los linfocitos T). Tu sistema
inmunológico es lo que combate las infecciones para
mantener a tu cuerpo saludable. Los glóbulos blancos
juegan un papel fundamental en la protección de una
persona de las enfermedades. Cuando tu sistema
inmunológico está siendo atacado, no puede proteger
a tu cuerpo de las infecciones y puedes enfermarte
fácilmente. Tu cuerpo corre un riesgo alto de contraer
muchas enfermedades. Por consiguiente, prácticamente
cualquier síntoma es posible cuando tienes el
VIH.

Cuando las personas con VIH contraen enfermedades
serias, se dice que tienen SIDA. No todas las personas con VIH
contraen el SIDA. El SIDA es la última etapa de la
infección por VIH. Las personas con SIDA pueden morirse de
una infección o de cáncer, y necesitan tomar
medicación para fortalecer su sistema inmunológico.
El sistema inmunológico de estas personas está
demasiado débil para combatir enfermedades y estos
individuos contraen enfermedades que en realidad no afectan a
otras personas. Una de estas enfermedades es el sarcoma de
Kaposi, un tipo raro de cáncer de piel. Otra es un tipo de
neumonía llamado neumonía por
Pneumocystis Carinii (conocida comúnmente por sus siglas
en inglés:
PCP).

¿Quién puede contraer
VIH/SIDA?

Cualquier persona está a riesgo de contraer
VIH/SIDA, pero las personas que tienen relaciones sexuales y/o
comparten agujas y jeringas con una persona infectada tienen
más probabilidades de contraer el VIH. Los bebés
pueden nacer con el virus si su madre está infectada. Es
posible infectarse al recibir una transfusión de sangre
infectada, pero el riesgo de esto es muy, muy bajo, ya que a toda
la sangre donada se le hacen pruebas para
ver si contiene VIH

¿Cómo se transmite el
VIH?

El VIH se transmite de una persona infectada a otra
persona a través de las relaciones sexuales por vía
vaginal, oral y anal. También puede transmitirse usando
drogas inyectables y compartiendo agujas o jeringas con una
persona infectada. El VIH también puede transmitirse de
una mujer embarazada
que está infectada a su bebé, antes de o durante el
parto y al dar el pecho. El VIH se encuentra en y puede
transmitirse a través del semen, los líquidos
vaginales, la sangre y la leche materna. En la saliva, las
lágrimas y la orina hay cantidades muy pequeñas del
VIH. Pero el riesgo de que el VIH pueda ser transmitido a
través de estos 3 últimos líquidos del
cuerpo es muy, muy bajo debido a que la cantidad de virus que
contienen es tan pequeña.
Hay sólo 3 maneras principales en que el VIH puede
transmitirse:

  • A través de líquidos sexuales
    infectados
  • A través de sangre infectada o productos
    de sangre infectados
  • De la madre infectada a su bebé durante el
    embarazo y
    el parto

El VIH no se transmite al tocar, abrazar o darle la mano
a una persona infectada. No se transmite al toser, estornudar,
dar besos secos, compartir vasos y platos, o tocar inodoros o
picaportes. Los animales
domésticos y los insectos que pican, como los mosquitos,
no transmiten el virus. El VIH tampoco se transmite al donar
sangre. Esto se debe a que para cada donante se usa una aguja
nueva y, por lo tanto, nunca se entra en contacto con la sangre
de otra persona
¿Cuáles son los síntomas del
VIH/SIDA?

Algunas personas se enferman dentro de las 6 semanas de
haberse infectado con el VIH, con los siguientes
síntomas:

  • Fiebre
  • Dolor de cabeza
  • Ganglios inflamados
  • Cansancio
  • Coyunturas y músculos doloridos
  • Dolor de garganta

Sin embargo, la mayoría de las personas con VIH
no tiene síntomas por años.
Cuando las personas con VIH contraen una enfermedad seria, se
dice que tienen SIDA.

Las personas con SIDA pueden tener cualquiera de los
siguientes síntomas:

  • Fiebre que dura más de un mes
  • Pérdida de peso
  • Cansancio extremo
  • Diarrea por más de 1 mes
  • Ganglios linfáticos agrandados
  • Falta de claridad al pensar
  • Pérdida del sentido del
    equilibrio

¿Qué debo hacer si creo que tengo VIH o
SIDA?

Si crees que puedes haber contraído VIH/SIDA o si
tienes síntomas, ve a tu proveedor de cuidados de salud de
inmediato. Cuanto más temprano te hagas la prueba y
recibas tratamiento, mejor. Si recibes tratamiento puedes
retrasar el progreso de la infección por VIH e incluso
prevenir que desarrolles SIDA.

¿Qué pasa con mi(s)
compañero(s/as) de relaciones sexuales?

Si has estado
expuesta al VIH, entonces tienes que decirles a todos tus
compañeros(as) de relaciones sexuales o a cualquier
persona con la que hayas compartido agujas o jeringas, que ellos
pueden haber estado expuestos. Si fuera necesario, trata de que
se hagan la prueba y reciban tratamiento. Si te parece que no
puedes decírselo a estas personas, entonces habla con tu
proveedor de cuidados de salud. Los proveedores de
cuidados de salud tienen maneras de informarles a las personas
que pueden haber estado expuestas.

¿Cómo se diagnostica el
VIH?

Mediante un simple análisis de sangre, llamado
prueba de anticuerpos contra el VIH, se puede determinar si
estás infectada con VIH. Tu cuerpo reacciona al VIH
produciendo anticuerpos dentro de un período de 2 a 8
semanas después de la exposición. La prueba muestra si tienes
estos anticuerpos en la sangre. Si los tienes, quiere decir que
estás infectada con el VIH. Es posible que obtengas un
resultado negativo a pesar de estar infectada con el VIH porque
los anticuerpos contra el VIH pueden tardar 12 semanas o
más en aparecer. Por consiguiente, si obtienes un
resultado negativo de la prueba, tendrás que volver a
hacerte una prueba de seguimiento para estar segura de que no
estás infectada con el VIH.

¿Cómo se trata el
VIH/SIDA?

Actualmente no hay ninguna cura para la infección
por VIH o el SIDA. El virus se queda en tu cuerpo por el resto de
tu vida. Los investigadores están intentando encontrar una
droga para
curar el VIH/SIDA. Se han creado muchas drogas que ayudan a
tratar el VIH/SIDA, pero no lo curan. Tu proveedor de cuidados de
salud también puede sugerirte otros tratamientos para
retrasar el progreso del VIH, como seguir una dieta saludable,
hacer ejercicio y reducir el estrés.

¿Cuánto tiempo tarda
el VIH en convertirse en SIDA?

Las personas con VIH normalmente pueden permanecer muy
saludables por muchos años después de que se han
infectado. El virus ataca lentamente al sistema
inmunológico y, en un punto dado, puede convertirse en
SIDA. Sin embargo, evitando las infecciones, tratando las
infecciones temprano, haciendo suficiente ejercicio, comiendo una
dieta saludable y siguiendo un estilo de vida
saludable, se pueden disminuir las posibilidades de que el VIH se
convierta en SIDA.
Un 30% de las personas con VIH desarrolla SIDA dentro de los 5
años. Esto significa que contraen una enfermedad seria,
como cáncer o neumonía, dentro de los 5
años. Algunas personas sólo desarrollan
síntomas leves dentro de estos 5 años, como
ganglios inflamados, diarrea,
fiebre y pérdida de peso. Aproximadamente un 50% de las
personas con VIH desarrolla SIDA dentro de los 10 años de
haberse infectado con VIH.

¿Cómo puedo evitar infectarme con el
VIH?

La manera mejor de evitar infectarse con el VIH es no
tener relaciones sexuales. Si decides tener relaciones sexuales,
debes seguir las prácticas más seguras. Tienes que
tener relaciones sexuales con una sola persona y esta persona
tiene que tener relaciones sexuales solamente contigo y no debe
tener ninguna enfermedad de transmisión sexual.
Asegúrate de usar un condón correctamente siempre
que tengas relaciones sexuales por vía vaginal, anal u
oral. VIH/SIDA

Herpes
El herpes es una
de las enfermedades de
transmisión sexual más comunes en los EE.UU. Es
una infección causada por dos virus diferentes pero
estrechamente relacionados. Ambos son muy fáciles de
contraer, tienen síntomas similares y pueden ocurrir en
diferentes partes del cuerpo. Cuando la infección
está en la boca, se la llama herpes oral. Cuando
está en o cerca de los órganos sexuales, se la
llama herpes genital.

¿Cómo se transmite el
herpes?

El contacto directo de piel con piel puede transmitir el
herpes. Esto incluye tocar, besar y el contacto sexual (vaginal,
anal y oral). Las partes húmedas de la boca, la garganta,
el ano, la vulva, la vagina y los ojos se infectan muy
fácilmente. La piel puede infectarse si está
cortada, irritada, quemada, con salpullido o con otras
lastimaduras. El herpes puede pasarse de una persona a otra, o de
una parte del cuerpo propio a otra. Si una persona tiene llagas
bucales de un resfriado, puede transmitir el virus durante el
sexo oral y
causar herpes genital. El herpes se propaga más
fácilmente cuando hay llagas abiertas. También
puede transmitirse antes de que se lleguen a formar las ampollas.
Se propaga menos fácilmente cuando las llagas han sanado,
las costras se han caído y la piel ha vuelto a la
normalidad. Es muy improbable que el herpes se transmita a
través de asientos de inodoro, piscinas, bañeras,
piscinas de hidromasaje o toallas húmedas. Una madre
infectada puede pasarle el virus a su bebé durante o
después del parto.

¿Cuáles son los síntomas del
herpes oral?

El herpes oral generalmente aparece en los labios o
dentro de la boca, en la forma de llagas de resfriado (ampollas
pequeñas). El herpes oral puede transmitirse a
través del contacto, por ejemplo, al dar besos o durante
el sexo oral. Es suficiente que haya contacto directo por un
período de tiempo breve para que el virus se transmita.
Las llagas de resfriado son comunes en los niños
pequeños. El herpes oral en las personas adultas es
generalmente sólo una reactivación de una
infección de la niñez. Las llagas de resfriado son
molestas pero inofensivas en niños y adultos, pero pueden
ser peligrosas para un recién nacido.

¿Cuáles son los síntomas del
herpes genital?

Muchas veces, el herpes genital no causa ningún
síntoma. Muchas personas llevan el virus en el cuerpo pero
los síntomas no aparecen por primera vez hasta que un
individuo se
infecta nuevamente. Cuando se tienen síntomas,
éstos pueden empezar de 2 a 20 días después
de que el virus ha entrado en el cuerpo o pueden tardar
más tiempo. La primera aparición de síntomas
durante la primera infección de herpes genital se llama
"herpes" primario. Al principio se puede tener una
sensación de hormigueo o picor en el área genital.
Puede haber dolor en las nalgas, piernas y el área de la
ingle. En el área cercana al lugar por donde el virus
entró al cuerpo aparecen pequeñas protuberancias
rojas – en los labios vaginales, el clítoris, la vagina,
la vulva, el cuello uterino, el ano, los muslos o las nalgas.
Estas protuberancias se convierten en ampollas o llagas abiertas.
Entre 24 y 72 horas después de que aparecen las
pequeñas ampollas, éstas pueden reventarse y dejar
lastimaduras dolorosas. Estas lastimaduras pueden
infectarse.

¿Cómo se diagnostica el
herpes?

Tu proveedor de cuidados de salud puede diagnosticar el
herpes observando las llagas durante un examen físico o
haciendo análisis con el líquido tomado de las
llagas. Si crees que tienes llagas de herpes, hazte ver de
inmediato por tu proveedor de cuidados de salud.

¿Hay tratamiento para el
herpes?

Sí. Tu proveedor de cuidados de salud puede
recetarte medicamentos que ayudan a que sanes más
rápido, hacen que los síntomas sean menos dolorosos
y disminuyen el riesgo de que aparezcan erupciones mientras
estás tomando las medicaciones. Estas medicaciones no
matan el virus y no impiden que te reaparezcan brotes en el
futuro. Una vez que contraes el virus del herpes, lo tienes para
siempre. Aunque no tengas ningún síntoma, el virus
está en tu cuerpo y puede reactivarse en cualquier
momento. Sin embargo, con el paso del tiempo, generalmente hay
cada vez menos brotes y éstos causan síntomas menos
severos. La frecuencia de las erupciones diminuye después
de tener herpes por cinco o seis años. El herpes no se
puede curar pero se puede tratar.

¿Qué es un brote?

Después de tener herpes primario (la primera
ocurrencia de síntomas del herpes), los síntomas
desaparecen pero el virus permanece en tu cuerpo. El virus puede
reactivarse en cualquier momento y causar un nuevo brote de
síntomas. Durante un brote, aparecen llagas nuevas en los
mismos lugares. Los síntomas son menos severos y duran
menos tiempo que los ocurridos durante la primera
aparición de síntomas.

Los síntomas que ocurren durante un brote
pueden incluir:

  • Ampollas
  • Heridas
  • Picor
  • Puede haber ciertas señales tempranas que indican que va a
    producirse un nuevo brote. Éstas incluyen
    sensación de hormigueo, ardor y picor en el lugar en
    que tuviste las llagas anteriormente. Estas señales
    pueden empezar horas o días antes del
    brote.

¿Cuál es la causa de un
brote?

No está claro cuál es la causa de los
brotes. Algunas ideas al respecto son:

  • Otras infecciones
  • Tensión física o
    emocional
  • Fiebre
  • Cirugía
  • Menstruación
  • Relaciones sexuales
  • Irritaciones de la piel (por ejemplo, las
    quemaduras de sol)
  • Trauma
  • Cambios hormonales
  • Alcohol
  • Problemas con el sistema
    inmunológico

¿Hay algo que yo pueda hacer para prevenir los
brotes?

Asegúrate de comer una dieta saludable, descansar
lo suficiente, hacer ejercicio y encontrar maneras de aliviar el
estrés. Si tienes brotes frecuentes o severos, habla con
tu proveedor de cuidados de salud sobre la posibilidad de tomar
medicación para prevenirlos o tratarlos
tempranamente.

¿Cómo puedo prevenir la
transmisión del herpes?

Si estás teniendo un brote de herpes, no debes
tener ningún contacto sexual hasta que todas las llagas
hayan sanado, las costras se hayan caído y la piel haya
vuelto a la normalidad. Usar condones cuando tienes llagas no
evita del todo la transmisión de la enfermedad ya que el
condón puede no cubrir las llagas del cuerpo. El virus
también puede propagarse de la piel a lugares que el
condón no cubre. Tocar las llagas puede propagar el herpes
a otras partes del cuerpo o a tu compañero(a). Si tu piel
ha vuelto nuevamente a la normalidad y no tienes ningún
síntoma de herpes, puedes volver a tener contacto sexual
pero el herpes todavía se puede propagar cuando no hay
síntomas (aunque el riesgo es bajo). Siempre debes usar un
condón cuando tienes relaciones sexuales por vía
oral, vaginal o anal.

Si te aparece cualquiera de las señales de
advertencia típicas que indican puede producirse un brote
– sensación de hormigueo, ardor y picor donde
estaban las llagas antes – debes dejar de tener contacto sexual
de inmediato. Estas señales pueden empezar unas horas o un
día antes de que se produzca una reactivación de
las llagas. Las personas con llagas no deben tener ningún
contacto sexual hasta que todas las llagas hayan sanado y todas
las costras se hayan caído. Habla con tu proveedor de
cuidados de salud para saber si es que debes tomar una
medicación para disminuir la posibilidad de transmitir
herpes a tu pareja.

¿Hay alguna relación entre el herpes y
el SIDA?

Las personas que tienen herpes u otras enfermedades de
transmisión sexual que causan lesiones genitales, corren
un mayor riesgo de contraer el VIH. Las lesiones son un punto por
el cual el VIH puede entrar al cuerpo y comenzar a propagarse. Si
una persona con VIH contrae también herpes genital, es
probable que la infección sea más
severa.

La sífilis

La sífilis es una enfermedad de
transmisión sexual (ETS) provocada por la bacteria
Treponema pallidum. A menudo se le ha llamado "la gran
imitadora" porque muchos de sus signos y
síntomas no pueden ser diferenciados de los de otras
enfermedades.

¿Que tan común es la
sífilis?

En los Estados Unidos,
según las autoridades de salud, se registraron 32,000
casos de sífilis en el año 2002, de los cuales
6,862 eran casos de sífilis primaria y secundaria. La
mitad de todos los casos de sífilis primaria y secundaria
reportados en 2002 ocurrieron en 16 condados y una ciudad; la
mayoría de ellos ocurrieron en personas entre 20 y 39
años de edad. La tasa más alta de sífilis
infecciosa se registró entre mujeres de 20 a 24
años de edad y entre hombres de 35 a 39 años. Los
casos de sífilis congénita reportados entre
recién nacidos disminuyeron de 492 casos en 2001 a 412 en
2002.

Entre 2001 y 2002, el número de casos reportados
de sífilis primaria y secundaria aumentó en 12.4%.
Las tasas en la población femenina continuaron en descenso
y, en general, la tasa entre los hombres fue 3.5 veces más
alta que la de las mujeres. Esto, aunado a los informes de
brotes de sífilis entre hombres que mantienen relaciones
sexuales con otros hombres (conocidos como MSM, por sus siglas en
inglés), parece indicar que las tasas de sífilis
entre estos hombres están aumentando.

¿Como se contrae la
sífilis?

La sífilis pasa de una persona a otra a
través del contacto directo con un chancro
sifilítico. Los chancros aparecen principalmente en los
genitales externos, la vagina, el ano o el recto. También
pueden aparecer en los labios y en la boca. La transmisión
de la bacteria ocurre durante las relaciones sexuales vaginales,
anales u orales. Las mujeres embarazadas que tienen esta
enfermedad pueden pasársela a los bebés que llevan
en el vientre. La sífilis no se propaga por el contacto
con inodoros, manillas de puertas, piscinas, bañeras y
jacuzzis ni por compartir ropa ni cubiertos.

¿Cuales son los signos y síntomas de la
sífilis en adultos?

Muchas personas que tienen sífilis están
libres de síntomas por años, pero enfrentan el
riesgo de complicaciones si no se tratan la enfermedad. Aunque
parece que la transmisión ocurre a partir de personas con
chancros, quienes están en la fase primaria o secundaria
de la enfermedad, muchos de estos chancros pasan desapercibidos.
Por lo tanto, la transmisión se da principalmente a partir
de personas que no saben que están infectadas.

Fase primaria

La fase primaria de la sífilis suele estar
marcada por la aparición de una sola úlcera
(llamada chancro), pero puede que aparezcan múltiples
úlceras. El tiempo que transcurre entre la
infección por sífilis y la aparición del
primer síntoma puede variar de 10 a 90 días (con un
promedio de 21 días). Por lo general, el chancro es firme,
redondo, pequeño e indoloro. Aparece en el sitio por donde
la sífilis entró al organismo. El chancro dura de 3
a 6 semanas y se cura sin tratamiento. Sin embargo, si no se
administra el tratamiento adecuado, la infección progresa
hasta pasar a la fase secundaria.

Fase secundaria

La fase secundaria se caracteriza por irritaciones en la
piel y lesiones en las membranas mucosas. Esta fase suele
comenzar con la aparición de una irritación en una
o más áreas del cuerpo. Por lo general, la
irritación no produce picazón. Las irritaciones
asociadas a la sífilis secundaria pueden aparecer mientras
se cura el chancro o varias semanas después de que el
chancro se haya curado. La irritación
característica de la sífilis secundaria puede tomar
el aspecto de puntos rugosos, de color rojo o marrón
rojizo, tanto en la palma de las manos como en la planta de los
pies. Sin embargo, también pueden aparecer irritaciones de
apariencia diferente en otras partes del cuerpo, que algunas
veces se parecen a irritaciones provocadas por otras
enfermedades. Algunas veces, las irritaciones asociadas a la
sífilis secundaria son tan leves que pasan desapercibidas.
Además de las irritaciones, puede que se presenten otros
síntomas durante la fase secundaria, que incluyen fiebre,
inflamación de los ganglios, dolor de
garganta, pérdida irregular del cabello, dolor de cabeza,
pérdida de peso, dolores musculares y fatiga. Los signos y
síntomas de la sífilis secundaria
desaparecerán con tratamiento o sin tratamiento, pero la
infección progresará hasta las fases latentes y
terciaria de la enfermedad, si no se administra ningún
tratamiento.

Fase terciaria

La fase latente (escondida) de la sífilis
comienza con la desaparición de los síntomas de la
fase secundaria. Sin tratamiento, la persona infectada
seguirá teniendo sífilis aun cuando no tenga ni
signos ni síntomas; la infección permanece en el
organismo. En la fase terciaria, la sífilis puede lesionar
los órganos internos, entre ellos el cerebro, los
nervios, los ojos, el corazón,
los vasos sanguíneos, el hígado, los huesos y las
articulaciones. Las lesiones internas pueden aparecer muchos
años más tarde. Entre los signos y síntomas
de la fase terciaria de la sífilis se encuentran la
dificultad para coordinar los movimientos musculares,
parálisis, entumecimiento, ceguera gradual y demencia.
Estas lesiones pueden ser lo suficientemente graves como para
producir la
muerte.

¿Qué efectos tiene la sífilis en
la mujer y en su
bebe?

La bacteria de la sífilis puede infectar al
bebé de una mujer durante el embarazo. Dependiendo de
cuánto tiempo una mujer embarazada ha estado infectada,
puede enfrentar un alto riesgo de tener un mortinato (bebé
nacido muerto) o dar a luz un
bebé que muere poco después de haber nacido. Un
bebé infectado puede que nazca sin los signos y
síntomas de la enfermedad. Sin embargo, si no es sometido
a tratamiento de inmediato, el bebé puede presentar serios
problemas al
cabo de unas cuantas semanas.

Si estos bebés no reciben tratamiento, pueden
sufrir de retardo del desarrollo,
convulsiones o morir.

¿Cómo se diagnostica la
sífilis?

Algunos proveedores de atención médica pueden diagnosticar
la sífilis mediante el examen del material de un chancro
(úlcera infecciosa) en un microscopio
especial llamado microscopio de campo oscuro. Si las bacterias de
la sífilis están presentes en el chancro, se
notarán al microscopio.

El examen de sangre es otra manera de determinar si una
persona tiene sífilis. Poco tiempo después de que
una persona se infecta, el organismo produce anticuerpos que
pueden ser detectados mediante un examen de sangre seguro, preciso y
económico. El nivel de anticuerpos en la sangre
será bajo durante meses o incluso años
después de que la enfermedad se ha curado. Dado que una
sífilis no tratada en una mujer embarazada puede infectar
y posiblemente provocar la muerte de su
bebé, toda mujer embarazada debería hacerse un
examen de sangre para la detección de la
sífilis.

¿Cuál es la relación entre la
sífilis y el VIH?

Las úlceras genitales (chancros) producidos por
la sífilis hacen que sea más fácil trasmitir
y contraer la infección por VIH por vía sexual. Se
calcula que el riesgo de contraer la infección por VIH es
de 2 a 5 veces más alto cuando está presente la
sífilis.

Las ETS ulcerosas que producen chancros, úlceras
o rupturas de la piel o de las mucosas, tales como la
sífilis, rompen las barreras que protegen contra las
infecciones. Las úlceras genitales producidas por la
sífilis pueden sangrar fácilmente y cuando entran
en contacto con la mucosa oral o rectal durante la
relación sexual aumentan las probabilidades de
infección y la susceptibilidad al VIH. Padecer de otras
ETS es un importante factor que predispone a la posibilidad de
contraer la infección por VIH porque las ETS son un
marcador de las conductas asociadas a la transmisión del
VIH.

¿Cuál es el tratamiento de la
sífilis?

La sífilis es fácil de curar en las
primeras fases. Si una persona ha tenido sífilis durante
menos de un año, la enfermedad se curará con una
sola inyección intramuscular de penicilina, que es un
antibiótico. Si una persona ha tenido sífilis por
más de un año, necesitará de dosis
adicionales. Para las personas que son alérgicas a la
penicilina, hay otros antibióticos disponibles para tratar
la sífilis. La sífilis no puede curarse con
remedios caseros ni con medicinas que se venden sin receta
médica. El tratamiento matará la bacteria de la
sífilis y evitará futuras lesiones, pero no
remediará las lesiones ya ocasionadas.

Dado que se dispone de un tratamiento eficaz, es
importante que las personas se hagan pruebas de detección
de la sífilis de manera constante si practican conductas
sexuales que las enfrentan al riesgo de contraer ETS.

Las personas que reciben tratamiento contra la
sífilis deben abstenerse de tener contacto sexual con
parejas nuevas hasta que los chancros sifilíticos hayan
desaparecido por completo. Las personas que tienen sífilis
deben comunicárselo inmediatamente a sus parejas de manera
que éstas también se sometan a las pruebas y
reciban tratamiento si es necesario.

¿Es recurrente la
sífilis?

El hecho de que una persona haya tenido sífilis
una vez no la protege de tenerla de nuevo. Una persona puede
seguir siendo susceptible a la reinfección aun cuando se
haya curado con el tratamiento. Solamente las pruebas de laboratorio
pueden confirmar si una persona tiene sífilis. Dado que
los chancros sifilíticos pueden estar escondidos en la
vagina, el recto o la boca, es probable que una persona no se
entere de que su pareja sexual tiene sífilis. El proveedor
de atención médica ayudará a determinar si
es necesario hacer nuevamente las pruebas de detección de
la sífilis después de que haya concluido el
tratamiento.

¿Como puede prevenirse la
sífilis?

La manera más segura de evitar contraer
enfermedades de transmisión sexual, incluida la
sífilis, es absteniéndose del contacto sexual o
tener con una relación duradera, mutuamente
monógama, con una pareja a quien le han hecho las pruebas
y se sabe que no está infectada.

Abstenerse de consumir alcohol y drogas puede
también ayudar a evitar la transmisión de la
sífilis ya que estas actividades pueden conllevar a
adoptar una conducta sexual
peligrosa. Es importante que las parejas sexuales hablen entre
ellas si tienen el VIH y si en el pasado han tenido otras ETS, de
manera que puedan tomar acciones
preventivas.

Las úlceras genitales que provocan ciertas
enfermedades, como la sífilis, pueden aparecer tanto en
las áreas genitales masculinas como las femeninas,
estén o no cubiertas o protegidas con un condón de
látex. El uso correcto y habitual de los condones de
látex puede reducir el riesgo de contraer la
sífilis, así como los herpes genitales y los
chancros, solamente si el área infectada o el área
de posible contacto están protegidas.

Los condones lubricados con espermicidas (especialmente
el Nonoxynol-9 ó N-9) no son más eficaces que
cualquier otro condón lubricado a la hora de evitar la
transmisión de las ETS. Según resultados de varios
estudios, el N-9 mismo puede producir lesiones genitales que
permiten la entrada del VIH y de otras ETS. En junio de 2001, los
CDC recomendaron que no se usara el N-9 como microbicida o
lubricante durante las relaciones sexuales anales. La
transmisión de una ETS, incluida la sífilis, no
puede prevenirse con lavarse los genitales, orinar o hacerse una
ducha vaginal después de la relación sexual.
Cualquier secreción, úlcera o irritación, en
particular en el área de la ingle, debe ser señal
para dejar de tener relaciones sexuales y ver a un médico
de inmediato.

La gonorrea

La gonorrea es una enfermedad de transmisión
sexual (ETS), provocada por la Neisseria gonorrhoeae,
una bacteria que puede crecer y multiplicarse fácilmente
en áreas húmedas y tibias del tracto reproductivo,
incluidos el cuello uterino (la abertura de la matriz), el
útero y las trompas de Falopio (también llamadas
oviductos) en la mujer, y en la uretra (conducto urinario) en la
mujer y en el hombre.
Esta bacteria también puede crecer en la boca, la
garganta, los ojos y el ano.

¿Cómo se contrae la
gonorrea?

La gonorrea se transmite por contacto con el pene, la
vagina, la boca o el ano. No es necesario que se dé la
eyaculación para transmitir o contraer la gonorrea. La
gonorrea también puede transmitirse de madre a hijo
durante el parto.

Las personas que han tenido gonorrea y han sido tratadas
pueden infectarse nuevamente si tienen relaciones sexuales con
una persona que tiene la enfermedad.

¿Quién esta expuesto al riesgo de
contraer la gorronea?

Toda persona sexualmente activa puede infectarse con
gonorrea. En los Estados Unidos, las tasas más altas de
infección se registran entre adolescentes
sexualmente activos,
jóvenes adultos y afro-americanos.

¿Cuáles son los signos y
síntomas de la gonorrea?

Aun cuando es probable que muchos hombres con gonorrea
no tengan ningún síntoma, en algunos
aparecerán algunos signos y síntomas de dos a cinco
días después de contraer la infección.
Algunos síntomas pueden tardar hasta 30 días en
aparecer. Entre los signos y síntomas se encuentran la
sensación de ardor al orinar y una secreción
blanca, amarilla o verde del pene. Algunas veces a los hombres
con gonorrea les duelen los testículos
o se les inflaman.

La mayoría de las mujeres con gonorrea no tienen
síntomas, y si los tienen, éstos son leves. Incluso
cuando tienen síntomas, pueden ser tan poco
específicos que se confunden con los síntomas de
una infección vaginal o de cistitis. Entre los primeros
síntomas y signos en las mujeres se encuentran una
sensación de dolor o ardor al orinar, aumento del flujo
vaginal y hemorragia vaginal entre períodos. Las mujeres
con gonorrea están expuestas al riesgo de tener graves
complicaciones de la infección, independientemente de la
presencia o gravedad de los síntomas.

Entre los síntomas de infección rectal
tanto en hombres como en mujeres, puede haber secreción,
picazón, dolor y sangrado en el ano y dolor al defecar.
También es probable que la infección rectal no
esté acompañada de síntomas. Las infecciones
de la garganta puede que provoquen dolor de garganta, pero por lo
general no se presenta ningún síntoma.

¿Cuáles son las complicaciones de la
gonorrea?

Cuando la gonorrea no es tratada, puede provocar
problemas graves y permanentes de salud tanto en hombres como en
mujeres.

En las mujeres, la gonorrea es una causa frecuente de
enfermedad inflamatoria pélvica (EIP). Anualmente, cerca
de un millón de mujeres en los Estados Unidos contraen
EIP. Las mujeres con EIP no tienen necesariamente
síntomas. Pero cuando sí se presentan, pueden ser
muy graves e incluir dolor abdominal y fiebre. La EIP puede
provocar abscesos internos (pústulas llenas de pus
difíciles de curar) y dolor pélvico crónico
prolongado. La EIP puede causar daños a las trompas de
Falopio y producir infertilidad o aumentar el riesgo de un
embarazo ectópico. El embarazo ectópico es una
afección potencialmente mortal en la cual un óvulo
fecundado crece fuera del útero, usualmente en una trompa
de Falopio.

En los hombres, la gonorrea puede provocar epididimitos,
una afección dolorosa de los testículos que puede
provocar infertilidad si no es tratada.

La gonorrea puede propagarse a la sangre y a las
articulaciones. Esta afección puede ser potencialmente
mortal. Además, las personas con gonorrea pueden
fácilmente infectarse con el VIH, el virus que causa el
SIDA. Las personas infectadas con VIH que tienen gonorrea tienen
más probabilidad de
transmitir el VIH a otra persona.

¿Qué efectos tiene la gonorrea en la
mujer embarazada y en su bebe?

Si una mujer embarazada tiene gonorrea, es probable que
le transmita la infección a su bebé cuando
éste pasa por la vía de parto durante el
nacimiento, lo que puede provocar ceguera, infección en
las articulaciones y una infección sanguínea
potencialmente mortal en el bebé. Tratar la gonorrea tan
pronto como es detectada en la mujer embarazada reducirá
el riesgo de estas complicaciones. Se aconseja que las mujeres
embarazadas vean a un proveedor de atención médica
para que sean examinadas y se les hagan las pruebas y el
tratamiento necesarios.

¿Cómo se diagnostica la
gonorrea?

Existen varias pruebas de laboratorio para diagnosticar
la gonorrea. Un médico o una enfermera puede tomar una
muestra de las partes del cuerpo que pudieran estar infectadas
(cuello uterino, uretra, recto o garganta) y enviarla a un
laboratorio para que sea analizada. La gonorrea presente en el
cuello uterino o en la uretra puede ser diagnosticada en el
laboratorio con un sencillo análisis de una muestra de
orina. Una prueba rápida de laboratorio que puede
realizarse en algunas clínicas y consultorios
médicos es la prueba de tinción de Gram. La
tinción de Gram de una muestra de la uretra o del cuello
del útero permite al médico visualizar la bacteria
en el microscopio. Este examen funciona mejor en los hombres que
en las mujeres.

¿Cuál es el tratamiento de la
gonorrea?

Existen varios antibióticos con los cuales se
puede tratar exitosamente la gonorrea en adolescentes y adultos.
Sin embargo, ha estado aumentando el número de cepas de
gonorrea resistentes a las medicinas en muchas partes del mundo,
incluidos los Estados Unidos, por lo que el tratamiento de la
gonorrea se hace cada vez más difícil. Dado que
muchas personas con gonorrea también tienen clamidia, otra
enfermedad de transmisión sexual, se suele recetar
antibióticos para tratar ambas infecciones al mismo
tiempo. Se recomienda que las personas con gonorrea
también se hagan pruebas para detectar otras
ETS.

Para curar la gonorrea, es necesario tomar toda la
medicina
recetada. Si bien la medicina detendrá la
infección, no remediará ninguna lesión
permanente provocada por la enfermedad. Las personas que han
tenido gonorrea y se han curado, pueden contraer nuevamente la
enfermedad si tienen relaciones sexuales con personas infectadas
con gonorrea. Si los síntomas en una persona persisten
después del tratamiento, debe regresar al médico
para que sea evaluada nuevamente.

¿Cómo puede prevenirse la
gonorrea?

La manera más segura de evitar el contagio de
enfermedades de transmisión sexual es absteniéndose
del contacto sexual o tener una relación duradera,
mutuamente monógama, con una pareja a quien se le han
hecho pruebas y se sabe que no está infectada.

Los condones de látex, cuando se usan de manera
habitual y correcta, pueden reducir el riesgo de
transmisión de la gonorrea.

Todo síntoma genital, como por ejemplo
secreción o ardor al orinar, una úlcera poco usual
o una irritación, debe ser razón para dejar de
tener relaciones sexuales y consultar a un proveedor de
atención médica de inmediato. Si a una persona se
le ha diagnosticado gonorrea y ha recibido tratamiento contra
esta enfermedad, debe informarle de esto a todas sus parejas
sexuales recientes para que éstas vean a un proveedor de
atención médica y reciban tratamiento. Esto
reducirá el riesgo de que las parejas sexuales presenten
complicaciones graves por la gonorrea y reducirá el riesgo
de reinfección en una persona. La persona con gonorrea y
todas sus parejas sexuales deben evitar tener relaciones sexuales
hasta que hayan terminado su tratamiento contra la
enfermedad.

Clamidia

Esta infección se debe a la bacteria Chlamydia
trachomatis, que se transmite por contacto con las mucosas
vaginales, uretra, recto, boca y ojos, afectando a la uretra en
los hombres (uretritis) y al cuello uterino en las mujeres
(cervicitis). Sus síntomas son más evidentes en el
hombre que en
la mujer, aunque no siempre resultan fáciles de descubrir.
Se confunden en ocasiones con los de la gonorrea, y son,
principalmente: secreción vaginal y dolor en la parte
inferior del vientre en las mujeres; en el hombre, inicialmente
aparecen secreciones transparentes que se vuelven luego cremosas,
así como muchas ganas de orinar y dolor. Se cura siguiendo
un tratamiento específico con antibióticos Si no se
atiende a tiempo, la infección puede progresar y provocar
esterilidad tanto en los hombres como en las mujeres.


Tricomonas

Las tricomonas son unos parásitos protozoos que
se ceban especialmente con las mujeres. El hombre puede contagiar
la enfermedad, aunque no presente ningún síntoma.
Estos microorganismos se transmiten habitualmente mediante
contacto sexual. No se descarta el contagio por medio de ropas o
toallas húmedas cuando se trata de niñas o ancianas
que carecen de los protectores y antisépticos bacilos de
Doderlein o los tienen en cantidades mínimas.

Secreción vaginal espumosa de aspecto amarillento
y un olor muy fuerte, picor e irritación, son sus
principales signos. Actualmente existen tratamientos muy
eficaces, que debe ser llevado a cabo por ambos miembros de la
pareja.

Cándidas

Tienen en común con las tricomonas un nombre a
primera vista inofensivo. Otras semejanzas estriban en que
afectan principalmente al sexo femenino y que el hombre suele ser
portador asintomático. Pero en esta ocasión, no se
trata de un protozoario sino de un hongo, que se asienta en las
mucosas húmedas y calientes. La vía de contagio es
diversa: relaciones sexuales, ropas, objetos, etc. Algunas
circunstancias, como el uso de antibióticos, el
estrés, la diabetes o una
disminución en las defensas naturales del organismo,
favorecen su proliferación. Por lo general, los
síntomas femeninos son: aumento de la secreción
vagina!, que se torna blanca y espesa, picor intenso, olor fuerte
y, en ocasiones, inflamación de las vías urinarias
y de la vejiga. El hombre presenta enrojecimiento en el glande y
prurito. Tiene un tratamiento rápido y eficaz si lo
realizan ambos miembros de la pareja.

Condilomas

Se trata de lesiones verrugosas similares a crestas de
gallo, causadas por un virus muy contagioso, y localizadas en la
vagina, cuello uterino o genitales externos de la mujer. Otro
síntoma es el prurito. En los hombres, la infección
puede ser asintomáticas o bien provocar verrugas. Se
transmite por contacto sexual y cutáneo. Su
curación debe ser llevada a cabo por el ginecólogo
con láser,
fármacos, electrocoagulación… Es imprescindible
acudir cuanto antes al especialista para evitar que se
extienda.

Ladillas

Conocidas asimismo con el nombre científico de
Phthirus pubis, son unos insectos parasitarios amarillentos, de
unos dos milímetros de largo, que viven en las partes
vellosas del cuerpo (pubis, axilas…) donde se agarran por medio
de las pinzas con que terminan sus patas. Chupan la sangre y
ponen sus huevos en las raíces del vello. Producen
picaduras que provocan molestos picores. Pueden contraerse
mediante el contacto sexual directo con una persona que tenga la
infección o por compartir las mismas toallas o
sábanas. Se eliminan con facilidad aplicando sobre la zona
afectada un insecticida de venta en
farmacias. No obstante, si tras aplicar este tratamiento, la
infección persiste, debe ser atendida por un
especialista.

Prevención
de las ETS

La mejor forma de protegerte es no tener relaciones
sexuales y si las tienes, que sean con una persona que
esté sana y que a la vez tenga relaciones solamente
contigo y usa preservativos.

Habla con tu compañero (a) acerca de su pasado
sexual y el uso de drogas
Observa cuidadosamente el cuerpo de la otra persona.
Fíjate en indicios de una ETS: sarpullido, llagas,
irritación de la piel o secreción. Si ves algo
sospechoso evita las relaciones sexuales.

Usa preservativos de látex al tener relaciones
sexuales por la vagina, ano o boca.
Hazte un análisis de ETS cada vez que tengas un examen de
salud. Si tienes relaciones sexuales con más de una
persona, hazte el análisis cada vez que creas estar en
riesgo, aún cuando no tengas síntomas.

Aprende a reconocer los indicios y síntomas de
una ETS. Si notas un síntoma que te preocupa,
examínate.

Si tiene una ETS, las personas que han tenido contacto
sexual contigo deben recibir tratamiento al mismo tiempo, si
tienes una ETS, no tengas relaciones sexuales hasta que el
médico diga que te has curado.

Aunque es normal y saludable disfrutar de una vida
sexual activa, existen más de 30 ETS que podrían
afectarte de un modo desagradable. Toma las precauciones
necesarias y practica el sexo seguro, así podrás
gozar aún más del sexo.

El uso correcto del
condón

Para fomentar el uso correcto del condón conviene
facilitar a hombres y mujeres la información siguiente, completada con una
demostración práctica en un modelo de pene
del modo de colocar el condón.

  • Cerciorarse de que el condón no está
    pasado de fecha, verificando la que figura en el
    envase.
  • Utilizar un condón de látex nuevo en
    cada acto sexual.
  • Abrir con cuidado el envase para no desgarrar el
    condón. No utilizar nunca un condón
    deteriorado.
  • No desenrollar el condón antes de colocarlo en
    el pene.
  • Colocar el condón de látex cuando el
    pene está en erección, antes de introducirlo en la
    vagina o el ano. 
  • Retirar la piel del prepucio, a menos que esté
    circuncidado. Asir con dos dedos la punta del condón y
    colocarlo en el extremo del pene.
  • Manteniéndolo asido por la punta desenrollar
    el condón hasta la base del pene.
  • Si se desgarra el condón durante su
    colocación, o si se teme que pueda desgarrarse durante
    el uso, reemplazarlo inmediatamente por uno nuevo.
  • No utilizar grasa, aceites minerales o de
    cocina, lociones o vaselina para lubricar los condones, ya que
    esto puede contribuir a que se rompan. Utilizar un lubricante
    acuoso, por ejemplo el KY.
  • Después de la eyaculación y con el pene
    todavía en erección, sujetar el condón por
    la base y sacar sin precipitación el pene del cuerpo de
    la pareja.
  • Retirar con cuidado el condón del pene,
    evitando que se desparrame el semen.
  • Anudar la abertura del condón como si
    éste fuera un globo para impedir que se desparrame el
    semen. Desecharlo luego, incinerarlo o enterrarlo.
  • No utilizar condones deteriorados o viejos. No
    utilizar nunca un condón Si:

– el envase está roto o despegado;

– el condón está resquebrajado, reseco o
pegajoso;

– el color está alterado o es
desigual.

El condón femenino

El condón femenino corresponde a una nueva
tecnología
de prevención del embarazo y de las ETS. Constituye una
importante opción en el contexto de cualquier servicio
asistencial, ya que es el único método de
protección contra el embarazo y las ETS/VIH del que pueden
disponer las mujeres por sí solas.

Está constituido por una fina vaina de
poliuretano, robusta, suave y transparente, que reviste la vagina
para crear una barrera contra los espermatozoides y las infecciones de
transmisión sexual. El dispositivo se inserta con la
mano en la vagina antes del coito y se retira
después.

Los estudios de laboratorio muestran que el
condón femenino opone una eficaz barrera al paso del VIH y
otros microorganismos transmitidos por vía sexual, con la
inclusión de los virus de la hepatitis B y del herpes.
Asimismo bloquea el paso de partículas mucho más
pequeñas que los espermatozoides y con un tamaño
cuatro veces menor que el del VIH.

Según datos recientes,
la tasa de transmisión de las ETS disminuye cuando el
público dispone de ambos tipos de condones, el femenino y
el masculino. Como esta reducción está
estrechamente relacionada con un descenso de actos sexuales no
protegidos, cabe pensar que la aparición del condón
femenino brinda una alternativa al masculino que contribuye a
aumentar la protección contra las ETS y el VIH.

El condón femenino representa un método de
barrera reversible con el que se ha obtenido al cabo de un
año una tasa de embarazos accidentales del orden del
15-25%. Esta proporción corresponde a la relación
uso-eficacia obtenida
con otros métodos de
barrera, ya que la gente no siempre los utiliza correctamente y
con regularidad. Por consiguiente, es posible que las mujeres
prefieran otro método anticonceptivo. Sin embargo, se
estima que el condón femenino, si se utiliza correctamente
en cada acto sexual, podría dar una tasa de embarazos
accidentales no superior al 5%.

Aunque este método suele requerir la
cooperación de ambos miembros de la pareja, lo cierto es
que el condón femenino es un dispositivo que la mujer
puede controlar por sí sola e insertarlo sin ayuda antes
del coito, aparte de que puede obtenerlo sin receta ni
intervención de un agente de salud. Las mujeres que
perseveran en el empleo del
condón femenino estiman que éste aumenta sus
opciones anticonceptivas y les hace sentirse protegidas y, en
cierto modo, dueñas de su salud reproductiva.

CapÍtulo III

Marco
metodológico

Diseño

Según Arias (1999) "Es la estrategia que
adopta el investigador para responder el problema
planteado".

En esta sección se definirá y se
justificará el tipo de investigación, según el diseño
o estrategia por emplear.

En el caso propuesto la elaboración de un Folleto
Educativo para la Prevención de Enfermedades de
Transmisión Sexual, el diseño es investigación
de Campo, según Balestrini (1998) señala lo
siguiente:

Permite establecer una interacción entre los objetivos y
la realidad de la situación de campo; observar y
recolectar los datos directamente de la realidad, en
situación natural; profundizar en la compresión
de los hallazgo encontrados con la aplicación de los
instrumentos; y proporcionarle al investigador una lectura de
la realidad objeto de estudio más rica en cuanto al
conocimiento
de la misma. (p.119)

El trabajo es de
campo, ya que, está dirigido a realizar encuestas
guiadas por un cuestionario
dirigidas a los alumnos de 5° y 6° grado de Educación
Básica del Colegio Parroquial San Bernardino, para la
recopilación de datos que sirvieron como
información para la elaboración de un Folleto
Educativo para la Prevención de Enfermedades de
Transmisión Sexual.

Población y Muestra

Población

La Población según Morles (1994) "Es el
conjunto para el cual serán válidas las
conclusiones que se obtengan: a los elementos o unidades
(personas, instituciones
o cosas) a las cuales se refiere la investigación". (p,
17)

Según Hurtado, (2000) la población de una
investigación está constituida por el conjunto de
seres en los cuales se va a estudiar la variable o evento, y que
además comparten, como características comunes, los
criterios de inclusión.

En la investigación que se realizó la
población estuvo constituida por setenta y cinco (75)
alumnos de la población activa que constituyen la
totalidad y dos (02) maestras del Colegio Parroquial San
Bernardino.

Muestra

Según Sampieri (1998) "la Muestra es en esencia
un subgrupo de la población. Digamos que es un subconjunto
de la población que pertenece a ese conjunto definido sus
características al que llamamos población".
(p.207)

En esta investigación el muestreo para el
caso de los empleados es probabilística según Arias
(1997) "proceso en el
que se conoce la probabilidad que tiene cada elemento de integrar
la muestra". (p. 51). La muestra de los alumnos fue dirigido a
diez (10) de la población total.

Técnicas

Se refiere a los procedimientos
utilizados para recolectar los datos que fueron objeto de
estudio: la encuesta, a
través del cuestionario.

Según Sampieri (1998) El Cuestionario "Consiste
en un conjunto de preguntas respecto a una o mas variables a
medir". (p. 276) (…) logrando que el investigador fije su
atención en ciertos aspectos y se sujete a determinadas
condiciones. (p. 109), el cuestionario se aplicó a la
muestra seleccionada de los alumnos del Colegio Parroquial San
Bernardino, el cual está conformado por siete (09)
preguntas en total.

Capítulo IV

Conclusión

Las enfermedades de transmisión sexual, o ETS,
como suelen abreviar los expertos, son un grupo de
dolencias infecciosas, causadas por diferentes tipos de
microbios, cuyo denominador común es que se contagian
preferentemente durante las relaciones sexuales. Algunas, como la
hepatitis B y el Sida, se transmiten también a
través de la sangre. Una gran parte de estas enfermedades
se centran en los genitales de ambos sexos. Pero, en algunos
casos, también pueden verse afectados otros órganos
o zonas, como el hígado, el intestino, las articulaciones,
el sistema inmunológico, etc.

Este grupo de enfermedades no es homogéneo en sus
consecuencias. Algunas pueden llegar a ser graves, causando dolor
crónico, esterilidad e incluso la muerte. En cambio otras,
si se tratan a tiempo, no son perjudiciales. La clave está
en diagnosticarlas a tiempo, ya que se propagan
rápidamente.

Se cree que la extensión de las ETS está
relacionada con la falta de información y por consecuencia
de precaución. Asimismo, se apunta que la mayoría
de los casos se dan en personas con una edad comprendida entre
los quince y los treinta años.

Recomendaciones

La decisión de tener una relación sexual
tiene un significado alto porque implica el cuerpo y las emociones. Es una
decisión que se debe analizar y estar muy seguros de lo que
se va a hacer. Si decides tener sexo, definitivamente
deberías primero pensar como prevenir el embarazo, y como
te protegerás contra las Enfermedades de
Transmisión Sexual (ETS).

Los adolescentes deben hablar con sus padres, o
algún adulto en el cual confíes para tener una
relación sexual.

Para sentirse seguro deben conversar con la pareja y
utilizar los anticonceptivos para evitar contagiarse de las
ETS.

Si crees que tienes una ETS (enfermedad de
transmisión sexual), será bueno que te hayas
comunicado con tu medico enseguida porque si has contraído
una ETS, cuanto más temprano te la detecte y cuanto
más temprano tu medico empiece a tratar, mayores
serán tus posibilidades de curarla o evitar que
empeore.

Bibliografía

Magis Rodríguez, Carlos, et. al. "La
situación del SIDA en México a
finales de 1998". En: Enfermedades Infecciosas y
Microbiológicas
. Noviembre-diciembre de 1998.
Año 18, No. 6. Pág. 236-244.

Magis-Rodríguez Carlos, Bravo-García
Enrique, y Rivera-Reyes Pilar. "EL SIDA en México en el
año 2000". En: La respuesta mexicana al SIDA: Mejores
Prácticas
. Editores: Uribe Zúñiga
Patricia y Magis-Rodríguez Carlos. Seriem Ángulos
del SIDA. Primera
edición. México, diciembre
del 2000.

Páginas de Internet.

1. Dirección General de Epidemiología
(DGE). Registro
Nacional de Casos de SIDA. Secretaría de
Salud. Datos
al 1 de noviembre del 2003.

2. Dirección General de Epidemiología
(DGE).
Encuestas Centinela. Secretaría de
Salud.

3. Instituto Nacional de
Estadística, Geografía
e
Informática (INEGI). Mortalidad
2001.

4. Dirección General de Estadística e Informática. Información procesada
sobre mortalidad por SIDA 1988-1998. Secretaría de
Salud.

ANEXOS

MÉTODOS
ANTICONCEPTIVOS

CALAMIDIA

LOS CONDONES

PIOJO PÚBICO

Herpes

Sífilis

 

Virus de papiloma humano
(VPH)

 

 

 

Autor:

Gabriela Romero

Landaeta Iliana

Pulido Marilyn

Partes: 1, 2
 Página anterior Volver al principio del trabajoPágina siguiente 

Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

Categorias
Newsletter